Costa del Este: Av. Centenario, Costa del Este, Ciudad Panamá | (507) 223-4742
Marbella: Calle 53 Este, Edificio Royal Center, Torre A, Piso 10 | (507) 223-4742
Conoce esta afección ósea que puede deformar la mandíbula y cómo es posible reconocerla.
Se reconoce como Mandibular Torus o rodete mandibular a una protuberancia o crecimiento óseo en la mandíbula, que no es apreciable a simple vista; ya que se encuentra ubicado mayormente en su parte interna.
Aunque no se trata de una complicación de alto riesgo, es una condición que debe ser evaluada y tratada por un especialista en odontología.
Bruxismo y estrés
Cuando se mantiene tensión en la mordida o rechinar de los dientes (un efecto común entre pacientes bruxistas o quienes padecen de estrés); se está propiciando el crecimiento del hueso.
Golpes o traumas fuertes
Una causa no menos relevante se produce ante fracturas incompletas, las cuales propician hipertrofia del hueso mandibular.
Características poblacionales
Esta anomalía se presenta en un 30% de la población mundial, con mayor prevalencia en personas del sexo femenino. Desde un punto de vista geográfico; los casos de rodete mandibular son más apreciables en las regiones de Norteamérica y Asia.
Edad
Por lo general se desarrolla antes de los 30 años; sin embargo, existe evidencia que refiere una afectación en personas de tercera edad que utilizan prótesis dental.
Densidad mineral ósea
En la medida que una persona aumenta en edad, la densidad mineral ósea se incrementa, haciendo que composición de los huesos cambie.
Genética
Algunos estudios señalan el desarrollo del Mandibular Torus como una condición hereditaria congénita.
Aunque puede aparecer en cualquier persona, es una condición que se presenta mayormente entre miembros del sexo masculino. De la misma manera, sus síntomas pueden variar de un paciente a otro, siendo característicos:
Carraspera o tos con necesidad constante de aclarar la garganta.
Disfonía o voz ronca que progresivamente se irá acentuando.
Sensación de ahogo o fatiga en pacientes crónicos.
En primer lugar, el odontólogo realiza una evaluación en el interior de la boca para verificar el estado de la mandíbula. Una vez ha efectuado el diagnóstico de la condición, puede aplicar el método de extirpación del hueso si el crecimiento es demasiado prominente.
Este procedimiento se realiza de forma ambulatoria, empleando anestesia local. Consiste en remover el exceso de hueso con algún tipo de instrumental de eje rotatorio, para luego completar su alisado con una lima (en el pasado se usaba una especie de cincel y martillo; hoy en día su uso ha sido prácticamente erradicado por completo).
Por último, se aplica la sutura y se cubre con cemento quirúrgico para evitar cualquier complicación durante el postoperatorio; tiempo en el que deberá suministrarse analgésicos y antinflamatorios para mantenerse a salvo del dolor y las infecciones.
Después de completar la cirugía, es importante cumplir una dieta blanda durante varios días para evitar lastimar la zona afectada. De la misma manera, hay que procurar extremar los hábitos de higiene bucal para conservar el área lo más limpia posible.
Ahora que conoces acerca del Mandibular Torus y su tratamiento, puedes consultar con nuestros expertos cualquier duda que tengas al respecto.
Recuerda que existen formas de eliminarlo; por lo que te invitamos a programar tu próxima cita y solicitar una evaluación especializada.
Av. Centenario, Costa del Este, Ciudad Panamá | (507) 223-4742
Royal Center, Ciudad Panamá | (507) 223-4742